Ministra Karla Rubilar destaca la Red de Protección Social en evento sobre pobreza multidimensional en el marco de la Asamblea General de la ONU

Titular de Desarrollo Social expuso en el evento “La pobreza en la encrucijada: utilizar el liderazgo y el índice de pobreza multidimensional para construir mejor”, en que Chile fue anfitrión y que tiene por objetivo diseñar soluciones para enfrentar los efectos sociales de la pandemia.

Con un saludo del Presidente de la República, Sebastián Piñera, comenzó el encuentro denominado “La pobreza en la encrucijada: utilizar el liderazgo y el índice de pobreza multidimensional para construir mejor”, en el que nuestro país fue invitado a participar como anfitrión, y en el que se abordó la pobreza multidimensional. Ello en una actividad paralela a la Asamblea General de Naciones Unidas.

En el saludo, el Mandatario abordó las principales medidas adoptadas por el Gobierno para hacer frente a la crisis socioeconómica causada por el coronavirus. Asimismo, recalcó la importancia de trabajar con miras a los próximos meses en la búsqueda de mecanismos de protección ligados a la reinserción de las mujeres en el mercado laboral y el aumento de los empleos formales, entre otros.

Debido a la emergencia sanitaria que afecta al mundo, la cita, que tradicionalmente se realizaba en Nueva York, tuvo que ser adaptada a encuentros virtuales.

A cargo de representar a Chile estuvo la ministra de Desarrollo Social y Familia, Karla Rubilar quien, junto a los mandatarios de Afganistán, Costa Rica, Honduras, el primer ministro de Nepal, y autoridades ministeriales de España, Filipinas, Sudáfrica, Pakistán, Mongolia e Indonesia, expusieron sobre la pobreza multidimensional.

El evento organizado por nuestro país, en conjunto con la iniciativa OPHI de la Universidad de Oxford y la Red de Pares de Pobreza Multidimensional Sur-Sur, busca discutir sobre la pobreza multidimensional como un importante insumo para hacer un diagnóstico e implementar un diseño que permitan enfrentar los efectos de la emergencia sanitaria y a la vez entregar soluciones.

Durante la presentación, la ministra Karla Rubilar comentó que, debido a la pandemia, diversos grupos de la sociedad se han visto afectados, motivo por el que “nuestro Gobierno ha activado una Red de Protección Social para responder ante la pérdida de ingresos y las diversas necesidades que experimentan las familias en el contexto de la crisis sanitaria y social. La información aportada por esta la Encuesta Social Covid representa un valioso insumo para anticipar efectos sobre la magnitud e intensidad de los efectos de la pandemia, además de monitorear y evaluar la capacidad de respuesta que la política social tiene frente a la crisis”.

Recalcó que “entre los principales hallazgos, se observa que el 59,4% de los hogares declaró haber disminuido sus ingresos durante la emergencia, incluyendo a un 41,5% que estima que sus ingresos fueron la mitad o menos de la mitad del nivel que tenían previo a la crisis y a otro 3,1% que declaró que sus ingresos se redujeron a cero”.

En ese sentido, la ministra puntualizó que “de cara a este complejo escenario, el Índice de Pobreza Multidimensional (IPM) se convierte en una herramienta fundamental a la hora de construir perfiles de hogares en pobreza, poniendo de relieve la interacción que se da en múltiples dimensiones y cómo las carencias que afectan específicamente a algunos integrantes del hogar repercuten sobre la situación del hogar en su conjunto. Por ejemplo, producto de la crisis, en un mismo hogar puede producirse la pérdida de empleo de personas adultas, la exclusión de niñas, niños y adolescentes del sistema escolar y el hacinamiento, situaciones que pueden reforzar otras carencias estructurales de base que el hogar presentaba antes, como la falta de escolaridad, una inserción laboral informal o vivir en un barrio inseguro”.

Al finalizar su exposición, la ministra recalcó la necesaria “urgencia de combinar esfuerzos que permitan sostener la realización de mediciones regulares de la pobreza en todas sus dimensiones junto con el desarrollo de estudios y estadísticas que registren en periodos de tiempo más breves los múltiples impactos y consecuencias que enfrentan los países ante la pandemia del Covid-19. Es a través de estos diagnósticos cada vez más robustos que se pueden articular esfuerzos focalizados y efectivos desde el estado, la sociedad civil y el sector privado para hacer frente a los grandes desafíos que enfrentamos como sociedad”.